The Mothman es una criatura inexplicable con grandes ojos rojos y alas grandes, como una polilla y ha sido visto justo antes las catástrofes más importantes del mundo.
La criatura a menudo parece no tener la cabeza, con los ojos rojos establecidos en su pecho. Se ha fotografiado y visto por testigos oculares y ha sido perseguido y acosado a un número de personas. El primer avistamiento de Mothman fue en noviembre de 1966 en Point Pleasant, Virginia. Dos parejas de recién casados viajaban por la Ruta 62, cuando vieron los ojos rojos y algo volar. Decenas de avistamientos fueron reportados en la zona poco después.
Un año después un desastre golpeó la ciudad de Point Pleasant, cuando se derrumbó el puente de plata y 46 personas murieron en el accidente. The Mothman fue visto en el puente antes del derrumbe.
domingo, 31 de julio de 2011
lunes, 25 de julio de 2011
La niña de las uñas de sangre
Esto era una niña, (la llamaremos Lidia) llamada lidia, era una niña pequeña que deambulaba por su pueblo en busca de una muñeca, entró en un anticuario y vio a una muñeca con las uñas muy largas y pintadas de rojo, la niña se la compro, el anticuario le dijo que tuviera mucho cuidado con esa muñeca, que estaba poseida por el mismisimo diablo, la niña,ajena a la advertencia se fue a su casa muy contenta. Era de noche cuando Lidia se despertó y oyó He matado a dos solo quedan 8. La niña, pensando que solo era un sueño se volvió a dormir, a la mañana siguiente vió a su muñeca que le faltaban dos uñas, y a sus padres degollados. La niña asustada arrojó la muñeca al río y se fue a casa de sus abuelos. Era de noche y Lidia volvió a escuchar la voz, pero esta vez decía: He matado a 3 solo quedan 5. La niña asustada fué a la habitación de sus abuelos y los vio degollados y a su perro también, y a los pies de la cama vio a la muñeca con una mano sin uñas. La niña volvió a tirar la muñeca al río y fué a casa de una amiga, Lidia estaba ya loca, por que pensaba que la culpa la tenía ella por haber comprado la muñeca, su amiga Sonia, la tranquilizó y se durmieron, pero Lidia no podía y volvió a oir lo mismo: He matado a dos solo quedan 3. La niña asustada y sabiendo lo que iba a volver a ver intentó huir pero no pudo, algo lo impedía y es que tenía la muñeca agarrada al tobillo derecho, asustada, ató una enorme piedra a la muñeca y la tiró al lago y se fue a casa de sus tíos, por la noche y despierta oyó: He matado a dos solo quedas TÚ. Algo se movió en la ventana, Lidia giró el cuello para ver que era y no había nada, cuando se giró vió la muñeca llena de sangre y le clavó la última uña en la sien, acabando con su vida.
sábado, 16 de julio de 2011
Tarde de cine
Un grupo de amigos decide ir una tarde al cine. Llegan tarde a la sesión y las luces ya están apagadas, aunque la peli aún no había empezado. Cuando uno de ellos se sentó en su asiento, pero uno de ellos notó un pinchazo al hacerlo. Al sentirlo, miró sobre su asiento y vio una jeringuilla. Sobre el asiento había un mensaje escrito: "Bienvenido al mundo del SIDA".
jueves, 7 de julio de 2011
Muerte en el microondas
La muchacha en cuestión estudiaba medicina y vivía una vida agitada repartida entre sus estudios y cuidar a la hermanita de 6 años. Un día se pegó la gran borrachera con sus amigos de clase y terminó acostándose con un tipo de su agrado.
Al día siguiente, entre las nubes de la resaca, la muchacha recordó de repente que su madre estaba a punto de regresar de su guardia en el hospital, donde trabajaba en el turno de noche hasta las 8 de la mañana, por lo cual la pobre apenas sí tuvo tiempo de despedirse del sujeto y volar a su casa para que cuando la madre llegara encontrara todo sin novedad, la casa ordenada, la nena desayunándose a tiempo, y ella lista
ir a clases.
El problema fue la ducha... Faltaban ya sólo unos minutos para que la madre regresara y la chica, que gozaba de una abundante cabellera, la tenía toda mojada. Para variar, el secador se había averiado...
No sé si se debió a los efectos tardíos del alcohol o al nerviosismo que le causaba la madre, muy histérica para estas cosas, el caso es que a la chica no se le ocurrió mejor manera de secar su cabello que meter su hermosa melena al microondas. Con un poco de esfuerzo lo consiguió y programó al máximo el aparato. En cuestión de minutos, se secó completamente el cabello justo cuando la madre entró saludando a todo el mundo sin darse cuenta de nada.
Cuando nuestra amiga llegó a la facultad, estaba medio demacrada, con cara de no haber dormido nada, y tambaleándose de un lado para otro. Demasiado incluso para la resaca que podía provocar botella y media de whisky con hielo
Mi amigo estaba presente. Me contó que apenas subió las escaleras para entrar al edificio, se desplomó como un saco de patatas. Estaba muerta...
Los doctores, al realizar la autopsia,no le encontraron nada malo en el cuerpo, ni enfermedad ni razón alguna para tal muerte súbita; y hubiese quedado así de no ser porque la hermanita le contó a mamá que antes de que ella llegara se había secado el pelo en el microondas. Los doctores, preacticando entonces una la autopsia craneal, encontraron su cerebro totalmente abrasado.
Al día siguiente, entre las nubes de la resaca, la muchacha recordó de repente que su madre estaba a punto de regresar de su guardia en el hospital, donde trabajaba en el turno de noche hasta las 8 de la mañana, por lo cual la pobre apenas sí tuvo tiempo de despedirse del sujeto y volar a su casa para que cuando la madre llegara encontrara todo sin novedad, la casa ordenada, la nena desayunándose a tiempo, y ella lista
ir a clases.
El problema fue la ducha... Faltaban ya sólo unos minutos para que la madre regresara y la chica, que gozaba de una abundante cabellera, la tenía toda mojada. Para variar, el secador se había averiado...
No sé si se debió a los efectos tardíos del alcohol o al nerviosismo que le causaba la madre, muy histérica para estas cosas, el caso es que a la chica no se le ocurrió mejor manera de secar su cabello que meter su hermosa melena al microondas. Con un poco de esfuerzo lo consiguió y programó al máximo el aparato. En cuestión de minutos, se secó completamente el cabello justo cuando la madre entró saludando a todo el mundo sin darse cuenta de nada.
Cuando nuestra amiga llegó a la facultad, estaba medio demacrada, con cara de no haber dormido nada, y tambaleándose de un lado para otro. Demasiado incluso para la resaca que podía provocar botella y media de whisky con hielo
Mi amigo estaba presente. Me contó que apenas subió las escaleras para entrar al edificio, se desplomó como un saco de patatas. Estaba muerta...
Los doctores, al realizar la autopsia,no le encontraron nada malo en el cuerpo, ni enfermedad ni razón alguna para tal muerte súbita; y hubiese quedado así de no ser porque la hermanita le contó a mamá que antes de que ella llegara se había secado el pelo en el microondas. Los doctores, preacticando entonces una la autopsia craneal, encontraron su cerebro totalmente abrasado.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)